jueves, 11 de diciembre de 2014

Nuestra Señora de Guadalupe, modelo perfecto de inculturación del Evangelio y prueba contundente para destruir la “leyenda negra” contra la Iglesia


         Las apariciones de la Madre de Dios, bajo la advocación de “Nuestra Señora de Guadalupe” (uno de cuyos significados en lengua náhuatl es "la que aplasta la cabeza de la serpiente"), constituyen un modelo perfecto de inculturación del Evangelio, principalmente contra las ideologías anticristianas, difusoras de la “leyenda negra” contra la Iglesia, que sostienen que la Iglesia es una institución humana, europea, que vino a Latinoamérica para sojuzgar a los indefensos y pacíficos pueblos indígenas, inculcándoles una ideología –el Evangelio, precisamente-, mediante la cual los sometieron por siglos, aprovechándose de su bondad e ingenuidad natural, robándoles su oro y dándoles a cambio “espejitos de colores” y una mentalidad de esclavos, la religión cristiana o, más precisamente, la católica. Esta “leyenda negra”, sirve de base a diversas ideologías que, desde fuera y desde dentro de la Iglesia, pretenden destruirla, para suplantar al Evangelio de Jesucristo y a su Iglesia por un Evangelio y por una Iglesia mundanos e intra-terrenos.
         Sin embargo, podemos afirmar que esta absurda “leyenda negra” caen por tierra y todos sus presupuestos se vienen abajo como un castillo de naipes, si al analizar la aparición de Nuestra Señora de Guadalupe somos capaces de encontrar elementos sobrenaturales en la aparición.
         Puestos a la tarea de analizar la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, nos damos con el hecho de que, aun antes de analizar la imagen en sí misma, al comenzar el análisis con el “soporte” de la imagen, esto es, la tilma o poncho de Juan Diego, nos damos de narices, desde el inicio, con un elemento sobrenatural, y es la duración de la misma tilma y su impecable estado de conservación, inexplicable desde el punto de vista natural. Una tilma, constituida con el material precario como la de Juan Diego, se deshace al poco tiempo; la de Juan Diego, está intacta y fresca desde hace ya 500 años, y esto sin que sea posible atribuir su conservación a la intervención de la mano del hombre.
         Todavía antes de analizar la imagen, nos damos con que la misma no se encuentra “impresa” sobre la tilma, sino que se encuentra ¡flotando! sobre la misma, lo cual es un milagro, es decir, es un hecho absolutamente imposible de explicar por las leyes de la física, conocidas o por conocer.
         Continuando luego con la imagen, ahora sí nos damos con una infinidad increíble de detalles que superan la capacidad de la razón humana y cuyo origen solo se puede atribuir a la Sabiduría y al Amor Divinos, empezando por el milagro de la conversión masiva de los indígenas, atribuida a la imagen, lo cual se interpreta como un “Pentecostés continuo” de ¡8 (ocho) años! De duración.
         Presentamos un trabajo muy elaborado acerca de la asombrosa cantidad de mensajes sobrenaturales contenidos en la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, realizado por estudiosos mexicanos, que demuestran nuestra hipótesis: la imagen es de origen sobrenatural, da por tierra la “leyenda negra” anti-católica y es un modelo perfectísimo de inculturación del Evangelio[1].
         “La Imagen de Nuestra Señora habla tanto a los indígenas como a los españoles. A los españoles les presenta a una mujer de Adviento, a una mujer embarazada del Salvador. Ella es la Inmaculada Concepción representada con toda la iconografía del Apocalipsis 12,1: Una mujer vestida de sol, con la luna bajo sus pies, con una corona de estrellas y que está a punto de dar a luz.
La Imagen de la Tilma es toda una catequesis para los indígenas. Como resultado del Mensaje de este ayate: EN LOS 7 AÑOS POSTERIORES A LAS APARICIONES, 8 MILLONES DE NATIVOS SE CONVIRTIERON A LA FE CATÓLICA. Esto representa un promedio de 3,000 conversiones diarias. Si recordamos que por la predicación de San Pedro, el día de Pentecostés se convirtieron 3,000 hombres, podemos apreciar que la Virgen inició un verdadero Pentecostés que duró 7 años. ESTA CONVERSIÓN EN MASA ES EL MAYOR MILAGRO DE LA IMAGEN DE NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE.
La Imagen de la Virgen de Guadalupe era en si misma todo un códice pleno de significados para los indios. Sus símbolos se pueden cotejar con otros códices que los mexicas elaboraron antes de la llegada de los españoles:
1. FLOR DE CUATRO PÉTALOS (Nahui Ollin): En la Imagen de la Virgen es la única flor en su estilo, además de ser la de más significación.
Ella indica que Nuestro Señor Jesucristo está presente en el centro de la Imagen, precisamente en el vientre de Nuestra Señora. María no es el centro de la Imagen, sino Jesús.
Esta flor es uno de los símbolos más altos de todo el pensamiento religioso y cosmogónico de los aztecas. La posición en “X” significa que está siempre en movimiento. Indica los 4 movimientos del sol, unidos por un 5o elemento que da equilibrio y estabilidad.
La ubicación central de esta flor en la imagen representa la maternidad de María. Ella es la Madre del Niño Sol, quien es el autor y dador de vida. Al ver este símbolo en la Imagen, a los indígenas no les quedó duda de que esta mujer estaba embarazada de Ometeotl-Dios Omnipotente, el Dios dueño del cielo y de la tierra, el único Dios Vivo y Verdadero.
Para los indígenas esta flor les indica: el universo entero, los 4 puntos cardinales, las 4 estaciones del año, 4 épocas pasadas, esperando el regreso de Quetzalcóatl, el 5o sol en plenitud, que coincide con el solsticio de invierno de 1531. Este Nahui Ollin también se encuentra plasmado en el centro del Calendario Azteca.
2. FLORES CERRO-CORAZÓN (Tépetl): Estas flores rodean el centro de la Imagen y sus tallos se encuentran enraizados en el manto de la virgen (que es el cielo). Para los indígenas lo Verdadero era lo que está bien arraigado.
Los Tépetls de la imagen son al mismo tiempo un cerro que habla, un corazón y un rostro.
La flor principal simboliza a un cerro en punta. Representa al Tepeyac al que se le llamaba cerro en punta o cerro nariz. Este cerro que habla está dando un mensaje universal para la humanidad. Es el cerro de la Palabra Divina o cerro del Canto Divino.
Los cerros para los indígenas representaban a los pueblos y a los templos. En el entorno de la flor principal se encuentran otras pequeñas flores, que indicaban que este cerro está lleno de la Verdad.
El tallo de la flor Tépetl es en realidad un río. Cerro y Agua significa civilización. Por lo tanto esta flor nos habla de una civilización enraizada en el cielo, llena de la Verdad de Dios. Esto es exactamente la Virgen de Guadalupe, que con su aparición da el fundamento de una nueva civilización llena de Vida, de Respeto, de Sabiduría y de la Verdad de Dios.
Al poner esta flor de cabeza, el cerro se convierte en corazón y el tallo en arterias. La vida está en el corazón y la sangre, y solo le pertenece a Dios. Es una civilización que le pertenece a Dios.
En la flor Tépetl también se puede ver un rostro (ojos, nariz y boca). Para los indígenas un SABIO era aquel que puede poner un rostro humano en el corazón ajeno. Es el líder es aquel que es capaz de humanizar esta civilización. Es Aquel que es capaz de hacer a la civilización más Misericordiosa: palpitando con el corazón del prójimo. ESTAR ATENTOS COMO LA VIRGEN MARÍA A LAS NECESIDADES DEL PRÓJIMO.
La Virgen nos presenta a su Hijo Jesucristo quien es el fundamento para hacer una nueva civilización enraizada en el cielo, llena del Amor de Dios, llena de la Verdad y de la Sabiduría de Dios.
3. RAYOS SOLARES: Los rayos dan a la Sagrada Imagen una aurora de luz. Parece que salen de ella indicándonos que está dando a luz al sol = a Dios, a Ometeotl que es Cristo Jesús; que esta representado en la flor de 4 pétalos que está en su vientre. La Virgen capturó al sol, lo hizo suyo y está llena de El. Ella es su celestial embajadora.
4. ROSTRO: Su rostro de joven y madre niña encarna en sus facciones no al indio ni al español, sino al mestizo; síntesis de una nueva raza cósmica; de alrededor de 16 años. En 1531 no había jóvenes mestizas de esa edad. Su mirada con la que “perfectamente a todas partes está mirando” refleja, serenidad, ternura y bondad.
Los Indígenas entendieron que la Virgen de Guadalupe no era una diosa. Tenía inclinado su rostro en señal de reverencia y respeto. Nuestra Señora se encuentra en posición de oración. Entre los indígenas no era correcto mirar de frente. Nos mira no como esclavos sino a hijos amados.
Por medio de las técnicas más modernas de computación digital, el Dr. J. Aste Tonsman descubrió la presencia de 13 personas en ambas córneas de los ojos de la Virgen. El burdo material del Ayate, hace imposible pintar estos detalles por la mano del hombre.
Tiene labios muy delgados. Un Nudo del Ayate resalta el labio inferior para mostrar una leve y tierna sonrisa.
5. CABELLO: Su cabello suelto indica su condición de doncella virgen, a diferencia de las indígenas casadas, pues estas últimas llevaban el cabello atado en forma de trenzas. Para los aztecas, la Mujer de la Imagen era al mismo tiempo Virgen y Madre.
6. MANTO: Para los mexicas un manto de color azul verdoso únicamente podía ser portado por el emperador. Azul que simboliza el cielo y el Verde que simboliza la Vida. Al ver a la Virgen, inmediatamente captan que están frente a una emperatriz.
El manto representa el cielo, y esta cubierto por 46 estrellas de ocho puntas que con el centro dan el número nueve. Este número recuerda el nacimiento de Quetzalcóatl.
Reconocidos astrónomos mencionan que las estrellas del manto están en la posición, como estaba el firmamento del 12 de diciembre de 1531, al momento de la estampación de Nuestra Señora en la Tilma de San Juan Diego.
7. BROCHE OVALADO: Para los indígenas indica una consagración a su Hijo Jesucristo.
La posición del broche según el pensamiento Náhuatl destaca la importancia de “Cristo” sobre María. El broche en el cuello de la Virgen, es la síntesis de dos culturas; la cruz española en el óvalo, es el símbolo del Evangelio cristiano.
La cruz negra recordaría a Quetzalcóatl, que se convirtió en la hormiga negra para obtener el maíz que poseía la hormiga roja en Tonacateptl, cerro del sustento. Así se creó la quinta humanidad formada por Quetzalcóatl que dio su sangre para amasar el polvo de sus huesos traídos del Mictlan. Es el sacrificio de Cristo que derramó su sangre por todos nosotros.
8. MANOS: Sus delicadas manos están juntas en posición europea de oración. Por otro lado indican la construcción de la “Casita Sagrada”, que a Juan Diego pidió, tramitará ante el Obispo Zumárraga. Petición que se traduce en una nueva sociedad, en un nuevo pueblo donde todos sean iguales entre sí. Las manos de la Virgen son distintas una de otra. La derecha es más blanca y estilizada, mientras que la izquierda es morena más llena. Aquí nuevamente podríamos hablar de la síntesis de 2 culturas: españoles e indios.
9. CINTA: Moño obscuro anudado en la parte superior del vientre anuncia su Maternidad, además de ser indicativo de una mujer noble. El Nican Mopohua así se refiere a Ella, como una mujer noble. Las mujeres indígenas cuando estaban embarazadas se ceñían arriba de la cintura para dejar libre el abultamiento del vientre.
10. TUNICA: Es de color rosa con sombras carmesí y representa a la tierra. En ella que se encuentran nueve arreglos florales dorados que significan los nueve pueblos que llegaron de Aztlán para fundar la gran Tenochtitlán, según narra el códice de 1576. Tiene la túnica un sobrante de tela, ribeteada por un galón dorado. Guarda similitud con el manto que en sus extremos sujeta el ángel, el cual significa la unión de la tierra con el cielo. Túnica y Manto.
11. 8 FLORES DE 8 PÉTALOS: Son flores que descienden a los cerros.
Representan la conjunción del Sol y de Venus.
Estos coincidían cada 104 años solares, equivalentes a 65 años venusianos.
Tanto el año sagrado de 260 días, el solar de 365, junto con el año de Venus de 584 coincidieron con la llegada de Santa María de Guadalupe. Entonces, a partir del 12 de diciembre de 1531, el hombre y el universo se encontraron para comenzar una época nueva, bajo el nuevo sol.
12. LUNA: Tanto el sol como la luna están presentes en la Imagen representan un verdadero eclipse. Jesús en el inmaculado vientre de su madre esta eclipsando y superando todo lo demás.
Son varios códices que en 1531 están narrando un eclipse. Para lo indígenas un eclipse era terrible porque se cubría al sol que era la fuente de la vida. Ellos pensaban que se acababa el mundo.
En la Imagen de Guadalupe, Nuestra Señora está eclipsando al sol. Ella se para delante del Sol pero es algo nuevo para los indígenas porque ella está descubriendo al verdadero Sol de Justicia que es su Hijo. Ella se para delante del sol y está diciéndole a los indígenas que en todo lo que ellos creían había sido superado en su Hijo Jesucristo.
La luna alude al nombre de “México-Tenochtitlan”, y Nuestra Señora con una nobleza que no es esclavizante, nos da el apoyo al sexto sol al pueblo Mexica.
Significado en Náhuatl de México:
Me-tztli= Luna
Xi-ctli= Ombligo, Centro
Co= (Partícula locativa) en “ El Ombligo de la Luna”.
Para los aztecas, México era el hogar del Dios Omnipotente.
13. ANGEL que sostiene a la Señora del Cielo: Es un indígena con rostro de niño que al mismo tiempo tiene en su cabello las grandes entradas de un anciano. El anciano para los aztecas es el sabio, es la experiencia y es la raíz.
Tiene alas de águila con colores azul, blanco y rojo. Es un guerrero águila que pertenece a los ejércitos del Sol (Cuauhtli-Ocelotl). Sus manos en alto comunican el cielo con la tierra. El ángel representa a San Juan Diego Cuauhtlatoatzin (el águila que habla). El Mensajero: Hombre fiel y verdadero que nos enseña el camino que llega a la Virgen Morena del Tepeyac.
Una característica de los “macehuales” (Gente del pueblo) era rasurarse la cabeza y significaba “Ser merecido por la sangre de Dios”. Los recién bautizados en aquel entonces eran rasurados por algunas órdenes religiosas. Para distinguir las diferentes clases sociales, los indígenas se rasuraban la cabeza en diferentes estilos. La iluminación del Ángel emana directamente del cuerpo de la santísima Virgen e ilumina la parte superior de su cabeza y brazos.
14. NUBES: Para los tenochcas alguien que viene entre nubes es alguien que trae un tesoro de riquezas espirituales. Las nubes que rodean la imagen se asocian con la altura, con la elevación del espíritu. Indican lo divino, además de simbolizar la vida. Anuncian la llegada de una nueva era en la que Ometeotl (el Dios Omnipotente) desciende a México. Esto nos recuerda en el pensamiento cristiano la encarnación del Hijo de Dios: “ El verbo de hizo carne y habitó entre nosotros” (Jn 1,14). Jesucristo el Hijo de Dios, llegó a nosotros a través de nuestra Señora de Guadalupe. Ella como aurora luminosa, anuncia la salvación a estas tierras del Valle de Anáhuac. En ella lo invisible, se vuelve visible.
15. ZAPATILLA: Casi imperceptible vemos el calzado derecho de la Virgen. Es de color amarillo cenizo.
1. 2. Y 11. GLIFOS DE LA TUNICA: La túnica tiene 5 clases de flores:
1) 1 de 4 pétalos. Es la más importante, y que representa al Niño-Sol.
2) 8 flores de 8 pétalos que presenta la conjunción del Sol y Venus.
3) 3 flores en botón.
4) Flores que están al borde de los Tepétls.
5) Flores que representan a Venus.
La FLOR Y CANTO: significan la Verdad de Dios. Los indígenas hacían oración bailando a Dios.
Desde la óptica de los indígenas, en la Imagen de la Virgen de Guadalupe, y en el relato de las apariciones, se encuentran referencias a una de las divinidades más amadas de los aztecas: La diosa Coatlicue-Tonantzin. Ella era considerada la Madre de todos los dioses y su festividad estaba relacionada al solsticio de invierno. Su templo se encontraba en las faldas del cerro del Tepeyac (lugar de las apariciones). Parece que hasta los indios inicialmente llamaron a Guadalupe con el nombre de esta diosa, casi reconociendo en ella la misma divinidad. Los indígenas le colocaban un título indígena: Tonantzin-Guadalupe. Tonantzin no es un nombre, es un título: "Nuestra Madrecita” (en forma reverencial).
Para los aztecas, el solsticio de invierno era el día más importante de su calendario religioso ya que significaba el nacimiento del nuevo sol. ¡El sol vencía a las tinieblas y resurgía victorioso!
No es coincidencia que Santa María de Guadalupe haya presentado a su Hijo justo en ese día, quedando claro para los indios que Aquel que ella traía en su seno era el verdadero Dios.
El solsticio de invierno debía haber sido el día 22 de diciembre, pero inició el día 12 porque en 1531 todavía no se hacia el cambio del Calendario Juliano al Calendario Gregoriano. Este cambio ocurrió 50 años después.
¿Quién pudo haber pintado esta imagen que representa una perfecta síntesis entre la iconografía cristiana y la cultura mesoamericana? A tan sólo 10 años de la conquista de México ¿Quién habría podido tener este profundo conocimiento de ambos mundos?
Los mexicas creían que, con los corazones y la sangre de los Sacrificios Humanos, podían alimentar a Dios, logrando así la armonía universal. Con su Imagen, la Virgen de Guadalupe les indicó que el Sacrificio Humano más grande ya estaba hecho: El Sacrificio de su Hijo Jesucristo en la Cruz. Es Él quien ofrece su sangre y su corazón para alimentarles a ustedes y no ustedes a Él. Es Él quien les da Vida a ustedes. Él quiere vivir en medio de ustedes.
María les dice a los indígenas, que ya no es necesario arrancar el corazón del cuerpo humano para lograr la armonía. Basta con poner nuestros corazones entre sus manos para que ella los ofrezca al verdadero Dios por quien se vive.
Hoy en día, Dios quiere vivir en medio de nosotros. Nuestra Madrecita nos sigue invitando a cada uno de nosotros a encontrarnos con su Divino Hijo.
La Virgen pedía que se le construyera una casita sagrada. Nosotros entendemos un templo o iglesia católica. Pero para los indígenas que se construyera un templo significaba que se construyera una nueva civilización. Santa María de Guadalupe estaba pidiendo una Nueva Civilización donde el centro fuera Cristo, Dios Omnipotente, Presente en la Eucaristía, con su Cuerpo, su Sangre, su Alma y su Divinidad. 
La Imagen de Guadalupe con todo este mensaje tocó el corazón de los indígenas. También tocó el corazón de los españoles, quienes sin entender su mensaje con una mentalidad náhuatl, comprendieron la importancia de una Imagen como esta”.
         Sin embargo, luego de este impresionante análisis y estudio, nos queda todavía detenernos en el hecho mismo que tiene por protagonista a la Virgen: cuando se analiza la imagen, se ve que la Virgen no tiene rasgos europeos –lo cual contradice de plano la tesis de la “leyenda negra” que ve a la Iglesia como una institución esclavizante de origen europeo, “romanizante”-, ni tampoco indígena, sino mestizos y puesto que el origen de la tilma no se explica por la mano humana, por los detalles mencionados, que sobrepasan a la razón humana, el mensaje que la Virgen transmite –el mensaje que la Virgen morena, con rasgos mestizos, transmite-, es, por lo tanto, también de origen celestial. En otras palabras: la Iglesia no puede ser nunca una institución europeizante, que impone una ideología romanizante, que busca esclavizar a los indígenas, porque en una aparición, que a todas luces es sobrenatural, la imagen de la Virgen posee rasgos mestizos: sería una contradicción, porque sería una institución que estaría esclavizándose a sí misma. El hecho de que la Virgen posea rasgos morenos y mestizos, descarta de plano que la Iglesia sea una institución con intenciones dominadoras, porque se presenta la Virgen como Madre de los indígenas y de los españoles, y al ángel, se los presenta en la imagen como hermano de los indígenas, porque tiene rasgos indígenas. Dicho esto, entonces, el foco de atención, se dirige al mensaje de la Virgen, al descartarse el hecho de que la Iglesia sea esa institución que busca imponerse para someter a los nativos.
¿Cuál es el mensaje de la Virgen de Guadalupe?
         Está en sus mismas palabras, y también en el contexto histórico y religioso que se vivía en el México de la época de las apariciones. En ese entonces, dominaban los indígenas guerreros y caníbales más fuertes, los cuales sometían a los pueblos indígenas más pacíficos por medio de la guerra, obligándolos a pagarles, como tributo de guerra, niños, hombres y mujeres, a los cuales los ofrecían en sacrificios humanos para sus ídolos demoníacos. La situación para estos pueblos indígenas pacíficos, sometidos por estos pueblos guerreros, era de completo terror, puesto que se encontraban a su merced, debido al mayor poderío de sus ejércitos y a su mayor capacidad combativa. La idolatría dominaba a los pueblos americanos y detrás de los ídolos, están los demonios, como lo recuerda San Pablo: “los ídolos de los gentiles son demonios” (cfr. 1 Cor 10, 20).
         Pero además de esto, están las palabras que la Virgen dirige a Juan Diego, de tono completamente maternal, en el que se puede palpar el Amor de Dios, y puesto que en Juan Diego estamos representados todos los americanos, podemos considerar esas palabras, como dichas a todos y cada uno de nosotros: “Juanito: el más pequeño de mis hijos, yo soy la siempre Virgen María, Madre del verdadero Dios, por quien se vive. Deseo vivamente que se me construya aquí un templo, para en él mostrar y prodigar todo mi amor, compasión, auxilio y defensa a todos los moradores de esta tierra y a todos los que me invoquen y en Mí confíen” (…) “Oye y ten entendido, hijo mío el más pequeño, que es nada lo que te asusta y aflige. No se turbe tu corazón, no temas, esa ni ninguna otra enfermedad o angustia. ¿Acaso no estoy aquí yo, que soy tu madre? ¿No estás bajo mi sombra? ¿No soy tu salud? ¿Qué más te falta? No te aflija la enfermedad de tu tío, que no morirá ahora de ella; estate seguro de que ya sanó” (…) La Virgen le pide a Juan Diego que suba y recoja diversas flores en “la cumbre del cerrillo”. Juan Diego fue al cerro, cortó las flores, “las juntó”, “las puso en el hueco de su tilma” y se las llevó a su “Presencia”. La Virgen “con sus venerables manos las tomó”, depositándolas nuevamente en su ayate, con la orden expresa de entregárselas personalmente al Obispo[2].
         Sin embargo, en el mensaje de la Virgen, además del amor maternal, está la proclamación de la Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo y la condición suya como Salvador del género humano: “Sabe y ten entendido, tú el más pequeño de mis hijos, que yo soy la siempre Virgen María, Madre del Dios verdadero, por quien se vive, Señor del cielo y de la tierra”[3]. Y como el Verdadero Dios es Jesucristo, la Virgen de Guadalupe estaba revelando a Jesucristo como el Salvador.
         Por último, es un modelo perfectísimo de inculturación del Evangelio, porque la Virgen, por un lado, se presenta con rasgos indígenas y como Madre de los indígenas, pero por otro lado, se presenta con el mensaje de los españoles, es decir, de quienes son los conquistadores, porque son quienes traen al continente americano la Religión Católica. La síntesis es perfectísima y la armonía no puede ser mayor: es la Madre de los indígenas, es la Reina de los ángeles, que tienen rasgos indígenas, y a su vez, trae el mensaje de los conquistadores, de los españoles. No puede haber un modelo de inculturación del Evangelio más perfecto que el de Nuestra Señora de Guadalupe. Además, la sola imagen, da por tierra, como decíamos, con la “leyenda negra”, porque los supuestos “oprimidos”, los indígenas, están representados en la Virgen y en el ángel; y los supuestos “opresores”, los españoles, conquistadores, ¡también están representados en la Virgen, porque Ella transmite el mismo mensaje que los conquistadores españoles, la Religión Católica de la Santa Iglesia Romana! ¡Asombrosa idea del cielo!
         En síntesis, el mensaje de Nuestra Señora de Guadalupe es: la Virgen es Madre de Dios, la Virgen es Madre de todos los hombres, indígenas, españoles y mestizos; Jesús es el Redentor de la humanidad; la Iglesia no es una institución esclavizante, sino la que trae el mensaje de la salvación; la aparición es absolutamente milagrosa, porque la tilma y la imagen impresa en ella no tienen explicación humana posible; Jesús ha venido para salvarnos de la esclavitud del pecado, del demonio y de la muerte; Jesús nos da su Sagrado Corazón Eucarístico y nos une como hermanos, infundiéndonos su Espíritu Santo, conduciéndonos, en el Espíritu Santo, el Amor de Dios, al seno del Padre, por la eternidad.




[1] VIDEOS RECOMENDADOS:
1) Programa Cara a Cara transmitido el 30 de Mayo de 2013; Monseñor Eduardo Chavez habla de La Virgen de Guadalupe (Minutos 10:08 al 53:08) http://www.youtube.com/watch?v=k6c6_hI090w https://www.youtube.com/watch?v=Zj2WW1uAOZk; 2) Descifrando el manto de la Virgen de Guadalupe (1/3) https://www.youtube.com/watch?v=xspNNVs2Rhk; http://gloria.tv/media/2wzn6cPCbRU; 3) Descifrando el manto de la Virgen de Guadalupe (2/3); https://www.youtube.com/watch?v=4uLAGZeDyMY; http://gloria.tv/media/hpM4mPAbFcT; 4) Descifrando el manto de la Virgen de Guadalupe (3/3) https://www.youtube.com/watch?v=kAmdXmUXpgk; http://gloria.tv/media/1VjhmaQYJz8; 5) Guadalupe: Una Imagen Viva; Documental 2010 (Minutos 19:07 al 22:23, 28:37 al 29:45 y 47:24 al 51:51) https://www.youtube.com/watch?v=RcxeMQMr3Wc; http://gloria.tv/media/iuqzbYz61oY; https://www.youtube.com/watch?v=pERG5bsU3-M; 6) Documental: La Sangre y la Rosa (2013) Narrador: Eduardo Verástegui, Director: Tim Watkins, (Minutos 1:06:13 al 1:16:47);
OTRAS FUENTES DE CONSULTA: 1) Códice Guadalupano: Monseñor Eduardo Chávez http://www.iseg.org.mx/index.php/articulos/74-codice-guadalupano; 2) Periódico El Ayate Guadalupano, 3 de Mayo de 2007, Director General: Monseñor Diego Monroy; Parte 1: http://virgenperegrina.org/documentos/documento.php?doc=103&ver=2&secc=2; Parte 2: http://www.virgenperegrina.org/documentos/documento.php?doc=107&ver=1&secc=2; Parte 3: http://virgenperegrina.org/documentos/documento.php?doc=113&ver=1&secc=2; Parte 4: http://www.virgenperegrina.org/documentos/documento.php?doc=115&ver=1&secc=2 — con Catolicos Unidos Cancùn, Pjm Maristas México, Mariana Rivera y 47 personas más.
[2] https://www.facebook.com/notes/nuestra-se%C3%B1ora-de-guadalupepatrona-de-m%C3%A9xico-emperatriz-de-am%C3%A9rica-latina/rese%C3%B1a-de-las-5-apariciones-de-nuestra-se%C3%B1ora-de-guadalupe/202655217045
[3] http://www.laverdadcatolica.org/guadalupe.htm

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